Espectacular reto de los compañeros del Real Club Victoria de Las Palmas de Gran Canaria.
Al igual que hiciera hace unos años el nadador David Meca, el bote Puerto de la Luz y el barquillo Zuleyka unieron ayer sábado las ciudades de Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria.
Al igual que hiciera hace unos años el nadador David Meca, el bote Puerto de la Luz y el barquillo Zuleyka unieron ayer sábado las ciudades de Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria.
Ambas embarcaciones hicieron historia este 14 de agosto al salir y llegar por primera vez tripulando un bote y un barquillo, modalidades pertenecientes al deporte autóctono de la Vela Latina Canaria, dentro de una travesía organizada con motivo del primer Centenario del Real Club Victoria.
La gran gesta de la vela vernácula comenzó el día previo con el traslado de los barcos en la Naviera Fred Olsen y con una recepción del Real Club Náutico de Tenerife.
Ayer, desde la salida, a las 08.00 horas, tanto las dos tripulaciones como las embarcaciones de apoyo tuvieron que sufrir las fuertes condiciones de mar y viento, con una media de 25 nudos -rachas de 30- y olas de dos a tres metros de altura que complicaron en extremo la navegación.
Cuando superaron las dos horas de travesía, tanto Alejandro Barrera, patrón del Puerto de la Luz, como Héctor Acevedo, del Zuleyka, comenzaron a controlar la situación y, a partir de ahí, caminaron con mayor soltura.
Sobre las cuatro de la tarde ya estaba el bote en la costa de la capital grancanaria, aguardando hora y media al barquillo para entrar juntos en la playa de las Canteras.
La fiesta fue total en la playa capitalina, con un numeroso público que disfrutó del referido momento histórico deportivo.
Tanto Alejandro Barrera como su presidente, Miguel Ángel Taisma, reconocieron las enormes dificultades en la primera parte de la travesía: "No había manera de poner navegar en condiciones, pero supimos esperar y la profesionalidad de todo el equipo nos ha permitido realizar esta gran gesta".
En igual sentido se expresó Héctor Acevedo: "He ganado la apuesta a mi tripulación porque ni 'trabucamos' y logramos completar dignamente toda la travesía".
"Una ola nos tiró un tripulante al agua y nos hizo trabajar duro, pero sacamos la casta y llegamos finalmente a Las Canteras", recordó.
El presidente del Real Club Victoria, Antonio Padrón, se abrazó a todos los tripulantes por haber marcado un hito histórico como David Meca.
"Hemos sufrido mucho. El viento racheado y la ola alta nos hizo temer lo peor, pero ya se sabe que tras la tempestad llega la calma y, casi a mitad de recorrido, las dos tripulaciones supieron dar toda una lección de cómo se navega ante tan adversas condiciones", resaltó Padrón
La gran gesta de la vela vernácula comenzó el día previo con el traslado de los barcos en la Naviera Fred Olsen y con una recepción del Real Club Náutico de Tenerife.
Ayer, desde la salida, a las 08.00 horas, tanto las dos tripulaciones como las embarcaciones de apoyo tuvieron que sufrir las fuertes condiciones de mar y viento, con una media de 25 nudos -rachas de 30- y olas de dos a tres metros de altura que complicaron en extremo la navegación.
Cuando superaron las dos horas de travesía, tanto Alejandro Barrera, patrón del Puerto de la Luz, como Héctor Acevedo, del Zuleyka, comenzaron a controlar la situación y, a partir de ahí, caminaron con mayor soltura.
Sobre las cuatro de la tarde ya estaba el bote en la costa de la capital grancanaria, aguardando hora y media al barquillo para entrar juntos en la playa de las Canteras.
La fiesta fue total en la playa capitalina, con un numeroso público que disfrutó del referido momento histórico deportivo.
Tanto Alejandro Barrera como su presidente, Miguel Ángel Taisma, reconocieron las enormes dificultades en la primera parte de la travesía: "No había manera de poner navegar en condiciones, pero supimos esperar y la profesionalidad de todo el equipo nos ha permitido realizar esta gran gesta".
En igual sentido se expresó Héctor Acevedo: "He ganado la apuesta a mi tripulación porque ni 'trabucamos' y logramos completar dignamente toda la travesía".
"Una ola nos tiró un tripulante al agua y nos hizo trabajar duro, pero sacamos la casta y llegamos finalmente a Las Canteras", recordó.
El presidente del Real Club Victoria, Antonio Padrón, se abrazó a todos los tripulantes por haber marcado un hito histórico como David Meca.
"Hemos sufrido mucho. El viento racheado y la ola alta nos hizo temer lo peor, pero ya se sabe que tras la tempestad llega la calma y, casi a mitad de recorrido, las dos tripulaciones supieron dar toda una lección de cómo se navega ante tan adversas condiciones", resaltó Padrón